GANADORES OCTAVA VERSIÓN.

Premio Defensores

Ganadores y ganadoras del Premio Nacional a la defensa de los Derechos Humanos en Colombia 2019

Homenaje a la Valentía

En una cálida y animada ceremonia de premiación en el auditorio Luis Carlos Galán de la Universidad Javeriana, el programa Diakonia Colombia y  ACT Iglesia Sueca entregaron el Premio Nacional a la defensa de los Derechos Humanos en Colombia 2019 – VIII Versión en sus cuatro categorías a los defensores, defensoras y organizaciones.

En su octava versión el Premio reconoce una vez más a quienes defienden la vida, protegen los territorios, construyen paz y buscan de manera incansable mejorar las condiciones de vida de las comunidades vulneradas en sus derechos y afectadas por el conflicto armado.

La defensora de derechos humanos Clemencia Carabali Rodallega,  los defensores y defensoras de la  Asociación Campesina del Valle del Río Cimitarra (ACVC), los defensoras y defensoras investigadores de la Consultoría para los Derechos Humanos y el Desplazamiento (CODHES) y el defensor Ricardo Esquivia Ballestas fueron las personas y procesos a los que el Jurado del Premio distinguió en sus distintas categorías. 

CLEMENCIA CARABALI RODALLEGA
Ganadora Categoría 1
DEFENSORA DEL AÑO

 “Aquella persona que por su trabajo desarrollado en el último año es testimonio significativo de la defensa de derechos humanos en Colombia.” 

 Clemencia Carabali Rodallega es presidenta y cofundadora de la Asociación de Mujeres Afrodescendientes del Norte del Cauca (ASOM). Sobre sus hombros recaen más de 30 años de constante trabajo en defensa del territorio ancestral de las comunidades negras y los derechos de las mujeres, superando toda clase de adversidades. Uno de sus principales campos de trabajo es el desarrollo de proyectos productivos basados en la recuperación de la finca tradicional, con el fin de promover la autonomía económica de las mujeres y el desarrollo de las fuerzas de producción tradicional del pueblo negro.  

ASOCIACIÓN CAMPESINA DEL VALLE DEL RÍO CIMITARRA (ACVC) 
Ganadores Categoría 2A
EXPERIENCIA O PROCESO COLECTIVO DEL AÑO. Nivel Proceso Social Comunitario.

Aquella experiencia colectiva que se destaque por su trabajo de defensa de derechos humanos desarrollado en el último año.

Desde su conformación en mayo de 1996 la Asociación Campesina del Valle del Río Cimitarra (ACVC) trabaja en la promoción y defensa de los derechos humanos de las comunidades campesinas de Valle del Río Cimitarra. Pero no solo ello. También desarrolla trabajo social, comunitario y político, buscando un modelo alternativo de desarrollo social en una región donde los intereses en megaproyectos extractivos marcan la agenda económica.  

CONSULTORÍA PARA LOS DERECHOS HUMANOS Y EL DESPLAZAMIENTO (CODHES) 
Ganadores Categoría 2B
EXPERIENCIA O PROCESO COLECTIVO DEL AÑO. Nivel ONG, Colectivo u ONG acompañantes.

Aquella experiencia colectiva que se destaque por su trabajo de defensa de derechos humanos desarrollado en el último año.

La Consultoría para los Derechos Humanos y el Desplazamiento (CODHES) monitorea constantemente la situación de derechos humanos en Colombia e investiga las razones, contextos y responsables de las graves violaciones que se cometen. Además, alerta sobre la posible ocurrencia de nuevos crímenes desde el análisis de la dinámica del conflicto y sus actores, y brinda respuestas oportunas a la crisis humanitaria y apoyo a las víctimas. 

RICARDO ESQUIVIA BALLESTAS 
Ganador Categoría
A TODA UNA VIDA

“Por su valor, perseverancia y presencia en la defensa de derechos humanos, con mínimo 30 años de trabajo en Colombia”.

Defensor de derechos humanos durante más de 40 años. Ha tenido gran incidencia política y social como mediador de conflictos y facilitador de procesos de construcción de paz. Además, ha participado activamente en la reconstrucción de lo ocurrido durante el conflicto armado colombiano y apoyado acciones emprendidas por sus comunidades para la superación del trauma generado por las cruentas incursiones de actores armados legales e ilegales. Ha impulsado procesos territoriales para la educación y formación para la paz que, entre otras herramientas, incluyen la realización de “diálogos improbables”.  

Las garantías para la defensa y protección de los derechos humanos, la exigibilidad del derecho a la memoria de las víctimas, la verdad, la justicia, la reparación y la no repetición, los derechos ambientales y territoriales, la libertad de expresión y asociación, la búsqueda de una paz sostenible, fueron algunas de las expresiones de quienes recibieron este sentido homenaje en un contexto nacional de exacerbación de la violencia en su contra y del cierre de espacios para su accionar.

Pese a esta coyuntura, miles de líderes y lideresas defienden, resisten y alzan la voz por sus comunidades, y por ello, a través del Premio Nacional a la Defensa de los Derechos Humanos en Colombia se busca enaltecer y respaldar su trabajo como un acto legítimo y de enorme valentía.